Calor sofocante puede alterar peligrosamente la presión arterial en hipertensos
Las altas temperaturas que se registran en las diferentes regiones de nuestro país, no solo desencadenan incomodidad o el riesgo de padecer un golpe de calor. El calor sofocante de estos días, también plantea una seria amenaza para los pacientes con hipertensión, así lo advierten los especialistas del Seguro Social de Salud.
La Dra. Julia Torres del Águila, experta en cardiología en el hospital Alberto Sabogal de EsSalud, explica la compleja interacción entre el calor y la salud arterial. Resulta que, las fluctuaciones climáticas, desde el frío extremo hasta intenso calor, desencadenan respuestas fisiológicas, poniendo de manifiesto la necesidad urgente de ajustar estrategias terapéuticas para los afectados.
“En algunos casos el calor hace que haya una disminución de la presión de manera temporal. A estos pacientes se les debe disminuir las dosis de la medicación ya que el consumo de medicamentos, sumado a la deshidratación por las altas temperaturas, genera mayor concentración de estos medicamentos en los pacientes hipertensos”, señaló la especialista.
Para esos días de intenso calor, la Dra. Julia Torres recomienda también una estricta dieta baja en sal y una constante hidratación debido a que presentarán mucha pérdida de volemia, es decir el volumen total de la sangre en circulación.
Atento a los síntomas
La hipertensión es una enfermedad crónica, no transmisible, que tiene gran prevalencia en nuestro país. Consiste en la elevación de los niveles de presión arterial de forma continua o sostenida, una patología que, sin un adecuado tratamiento, puede llevar a muchas afecciones médicas como enfermedades del corazón, accidentes cerebrovasculares, entre otros.
Por ello, la Dra. Torres recomienda acudir al médico de inmediato si presenta síntomas como: mareos, sudoración excesiva o hasta desmayos. Esto podría significar que el paciente hipertenso necesite un cambio o rectificación de las dosis de su medicación.
Según la Dra. Torres, existen factores de riesgo que van desde la mala dieta, hasta la poca actividad física, razones que hoy en día provoca un aumento de casos de pacientes diagnosticados con hipertensión. “El sedentarismo, sumado a algunos vicios como el alcohol o el tabaco, aumentan la incidencia de hipertensión y la cronicidad de esta enfermedad”, advirtió.
Actualmente, al menos un paciente al mes ingresa a hospitalización por una crisis hipertensiva, en el servicio de Cardiología del hospital Alberto Sabogal Sologuren. Esta situación médica se caracteriza por una elevación rápida y significativa de la presión arterial. No atenderla a tiempo podría ocasionar daño cerebral, insuficiencia cardíaca, daño renal u daño en otros órganos.
