La inteligencia artificial transforma la educación con contenidos más ágiles y personalizados
Lima, mayo de 2025.- La incorporación de la inteligencia artificial (IA) en el sector educativo marca un cambio profundo en la forma de enseñar y aprender. De acuerdo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la IA está dando paso a un nuevo paradigma centrado en la adaptabilidad, la eficiencia y la equidad, al transformar desde la generación de contenidos hasta la gestión pedagógica y el acompañamiento a estudiantes.
En esta nueva era educativa, herramientas de IA generativa como ChatGPT y Jasper permiten crear guiones, resúmenes, explicaciones y descripciones de cursos en cuestión de minutos. “Creamos cápsulas formativas, guiones y recursos interactivos con mayor rapidez y precisión temática, lo que nos permite responder ágilmente a las necesidades del mercado”, explica Rómulo Martínez, director de Campus Romero, plataforma tecnológica especializada en formación corporativa.
Uno de los mayores aportes de la IA es su capacidad para personalizar el aprendizaje. Mediante el análisis de datos sobre desempeño y estilo cognitivo, los algoritmos ajustan contenidos en tiempo real y sugieren recursos adaptados a cada estudiante. “Hoy podemos ofrecer experiencias formativas a la medida de cada perfil, lo que mejora la motivación y la retención”, señala Martínez.
Además, tecnologías como Murf AI permiten generar subtítulos automáticos, convertir texto a voz con entonación natural y adaptar formatos para personas con discapacidades visuales, auditivas o cognitivas. Esto amplía el acceso a la educación y reduce barreras idiomáticas y tecnológicas.
La automatización de procesos también beneficia a los docentes, liberándolos de tareas operativas como calificaciones, gestión de horarios o elaboración de reportes mediante plataformas como Gradescope. Asimismo, los chatbots educativos, como Intercom o Tidio, permiten brindar atención personalizada 24/7 y facilitar el acceso a recursos en modelos asincrónicos.
La IA también se convierte en aliada estratégica para las instituciones al permitir el análisis predictivo de datos. Esto les ayuda a anticipar riesgos de deserción, ajustar currículos y asignar recursos con mayor eficiencia. En ese sentido, Campus Romero ha integrado IA en múltiples niveles: desde la creación de contenidos hasta la personalización del aprendizaje y el análisis del desempeño, reafirmando su apuesta por la innovación, la accesibilidad y la tecnología.
“Creemos que la inteligencia artificial marca un antes y un después en la educación. No es solo una herramienta de apoyo, es una aliada estratégica que amplía el acceso, mejora la calidad y hace la formación más flexible y centrada en las personas”, concluye Martínez.