Energías limpias permiten reducir hasta 43% de CO₂ y 50% de óxidos nitrosos en industrias peruanas
Lima, junio de 2025.- La adopción de energías limpias en sectores clave de la economía peruana, como la agroindustria, minería y transporte, está generando importantes beneficios ambientales y económicos. Tecnologías como la energía solar fotovoltaica, el gas licuado de petróleo (GLP), los sistemas híbridos y las soluciones Dual Diésel Fuel están logrando reducir significativamente las emisiones contaminantes y mejorar la eficiencia operativa.
Según datos de laboratorios acreditados por INACAL, algunas empresas agroexportadoras del norte del país han conseguido reducir hasta en un 43% sus emisiones de dióxido de carbono (CO₂) equivalente y más del 50% de óxidos nitrosos (NOx), gracias a la modernización de sus procesos térmicos. Otras compañías, por su parte, han reemplazado grupos electrógenos por paneles solares y baterías, eliminando hasta el 100% del consumo de diésel en zonas no interconectadas.
En minería, agroindustria y pesquería, el uso del GLP como reemplazo parcial o total del diésel ha generado ahorros de hasta un 40% en costos operativos. Las tecnologías Dual Diésel Fuel también han contribuido, permitiendo reducir hasta un 20% del gasto energético. En el sector transporte, la conversión de flotas al GLP ha resultado en una disminución del 10% en los costos estructurales, respaldada por una red nacional de más de 1,500 estaciones de servicio.
“Las mejoras en emisiones han sido evidentes en todos los sectores con los que trabajamos. En muchos casos, la reducción de gases como CO₂, óxidos nitrosos y monóxido de carbono ha superado los dos dígitos, alcanzando picos de hasta 93% en procesos intensivos como calderas, montacargas o autogeneración eléctrica”, indicó Alessandra Dentone, directora Comercial de Solgas.
Además, en zonas rurales, diversas operaciones agroindustriales ya utilizan energía solar para accionar bombas de riego o abastecer sus sistemas eléctricos de manera autónoma. Algunas incluso han comenzado a implementar diagnósticos energéticos integrales para rediseñar su matriz de consumo, logrando sustituir hasta el 50% del uso de diésel sin afectar el rendimiento.
“Mientras el Perú avanza hacia una economía baja en carbono, estas experiencias demuestran que el cambio no depende exclusivamente de grandes proyectos, sino de decisiones estratégicas que integran energías disponibles, generan valor económico y promueven la sostenibilidad en la base productiva del país”, concluyó Dentone.