Ecología

Día del Consumo Responsable: Aprende cómo reciclar el plástico

Según cifras del Ministerio del Ambiente (MINAM), en el país se consume aproximadamente 950 mil toneladas de plásticos al año. Solo en Lima Metropolitana y Callao se genera a diario más de 886 toneladas de residuos de este material, representando un 46 % a nivel nacional. En promedio, un peruano usa 30 kilos de plástico al año.

Muchos de los productos que empleamos a diario están hechos a base de este material o lo contienen puesto que es muy versátil, eficiente en su uso, duradero y resistente, pero sobre todo es económico y accesible. Por lo tanto, prohibir los plásticos no es una solución frente a la problemática, pero sí debe ser dispuesto de manera correcta para que no tenga un impacto negativo en el medio ambiente, explica Fiorella Danjoy, directora regional de la ONG Recicla LATAM. 

De acuerdo con el MINAN, en nuestro país hay un bajo porcentaje de plástico que es reciclado ya que solo 3 de cada 10 peruanos contribuye con las iniciativas del reciclaje. Por ello, en el marco del Día Mundial del Consumo Responsable (15 de marzo), la especialista da los pasos a seguir para disponer correctamente de este material.

  1. Identifica los plásticos reciclables. Revisa estos símbolos en los envases para saber cuáles son reciclables: PET (1), HDPE (2) y PP (5).
  2. Aplasta el envase para reducir su volumen.
  3. Separa las botellas y envases plásticos para optimizar el espacio en tu contenedor de reciclaje. Esto facilita su transporte y procesamiento en las plantas de reciclaje.
  4. Deposita los plásticos en estaciones de reciclaje o puntos limpios cercanos a tu domicilio.

Las personas deben hacerse responsables de lo que eligen consumir, desde un producto en empaques que se puedan reciclar hasta la disposición correcta del mismo.

Danjoy, también, explica cómo funciona la cadena de reciclaje del plástico, tomando como ejemplo una botella PET.

  • Recolección y separación. Las botellas y envases PET son recolectados por los recicladores formales a través de contenedores de reciclaje o del programa de Segregación en la Fuente con la que cuentan algunas municipalidades. Luego, las separan de otros plásticos para evitar contaminación.
  • Limpieza y triturado. Se lavan para eliminar etiquetas, residuos y adhesivos. Posteriormente, se trituran en pequeñas hojuelas que servirán como materia prima.
  • Procesamiento y transformación. Las hojuelas PET se someten a procesos de fundido y extrusión para convertirlas en gránulos (pellets), que se utilizan para fabricar nuevos productos.
  • Fabricación de nuevos productos. Los pellets reciclados se emplean para producir nuevas botellas y envases, entre otros artículos.
  • Reincorporación a la industria. Las botellas recicladas son enviadas a embotelladoras, donde se convierten nuevamente en envases para bebidas y otros productos.
  • Distribución y venta. Los nuevos envases son llenados, etiquetados y distribuidos a las tiendas y los supermercados, donde llegan nuevamente a los consumidores, completando así el ciclo de la economía circular.

Se estima que una economía circular del plástico tiene el potencial de reducir en un 80 % el volumen anual de residuos que llegan a los océanos para el 2040. Además, promete ahorrar 200 000 millones de dólares al año, reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 25 % y crear 700 000 trabajos adicionales.

De acuerdo con la vocera, para lograr implementar la economía circular de los plásticos, deben intervenir todos los actores relacionados al ciclo de vida de este material. Desde el sector privado, que se encarga de la producción y el uso del plástico, los gobiernos con un ecosistema legal que facilite y solucione, y los consumidores finales conscientes.