Cuatro claves para desarrollar espacios laborales productivos
En todo tipo de trabajo, la eficiencia y el rendimiento son esenciales. Para cumplir ello, contar con un espacio físico de trabajo bien organizado, y con ciertos elementos, puede marcar la diferencia y fomentar la productividad.
“El adecuado diseño de un espacio puede reducir el estrés y aumentar la productividad de los colaboradores en una empresa, tanto en oficinas como en viviendas (en trabajo remoto o híbrido). Pero, sobre todo, promueve el bienestar a través de la percepción del espacio, generando y transformando emociones”, explica Yaquini Ticllacuri, arquitecta y docente de la Universidad Tecnológica del Perú (UTP).
Para ello, la docente comparte y detalla algunos elementos que pueden impactar en nuestra concentración y eficacia:
- Iluminación. Según la arquitecta, la luz natural mejora el estado de ánimo y la concentración, reduciendo también la fatiga ocular. Por eso, enfatiza la importancia de aprovechar al máximo este tipo de luz en los espacios de trabajo y buscar el equilibrio entre la iluminación artificial y la que proporciona el sol. «Para estudiar, se recomienda luz neutra, que más se asemeja a la luz solar, siendo también la más agradable para leer”, explica. Para los momentos en los que no es posible contar con luz natural, recomienda utilizar aquellas que imiten su espectro, como las bombillas LED de luz blanca. Estas pueden ajustarse en intensidad y color para adaptarse a las distintas horas del día, creando un ambiente más cómodo y estimulante.
- Sonidos. La docente de la UTP menciona que el ruido es un factor que puede afectar la concentración, por lo que recomienda algunas estrategias para minimizar las distracciones sonoras, como utilizar cojines y cortinas de tela. “Los accesorios en las paredes y las alfombras sobre pisos de madera ayudan a amortiguar el sonido”, señala.
- Colores. Yaquini explica la importancia de los colores en los espacios de trabajo. “Tonos como el azul y el verde son conocidos por promover la calma y la concentración, mientras que los más vibrantes, como el amarillo, pueden estimular la creatividad. El color invita a una experiencia sensorial y mental porque apela a las emociones, estimula y hace que las personas se sientan más seguras y productivas. Es importante equilibrar estos tonos y utilizarlos de manera estratégica en el diseño del espacio”, comenta.
- Mobiliario. “Pasar largas horas sentado puede tener efectos negativos en la salud si no se cuenta con el mobiliario adecuado. Los muebles que se usen en el trabajo, sea remoto o presencial, deben ser ergonómicos, respetando la forma del cuerpo humano. Esto no solo reduce el dolor, sino que también proporciona comodidad y aumenta la productividad al reducir las molestias físicas», indica.
Finalmente, a quienes trabajan desde casa, la docente de la UTP recomienda crear un espacio que contenga una composición armoniosa con su entorno y su personalidad, rodeándose de elementos que le agraden, con buena iluminación y ventilación. Además, de ser posible, contar con un área verde, usar el color de su preferencia y contar con muebles ergonométricos.