¿Cómo mover su empresa hacia el software en la nube?
Por Raju Vegesna, Jefe de Zoho Corporation.
El auge por la migración hacia servicios en la nube lleva varios años en el mundo empresarial ante los enormes beneficios que ofrece tanto a las organizaciones como a sus colaboradores.
Inicialmente, las compañías acceden al software que requieren con el mismo esquema de un servicio público: pagan mensualmente por el número de usuarios y las aplicaciones que requirieron. Esta característica les brinda la posibilidad de ampliar y reducir rápidamente sus puestos de trabajo sin incurrir en gastos adicionales, por ejemplo para atender la demanda de una temporada específica.
Así mismo, reduce los gastos en soporte, mantenimiento y actualización de las operaciones TI que, en general, están a cargo del proveedor online. Gracias a este ahorro, las compañías pueden destinar mayores recursos en planes comerciales o de producto, en lugar de invertir en el mantenimiento de su infraestructura tecnológica.
Para completar, los servicios en la nube mejoran la experiencia de los usuarios y colaboradores, quienes pueden acceder a los recursos que necesitan en sus trabajos, desde cualquier dispositivo conectado a ‘la red de redes’ y en el momento en que lo necesiten. Esta propiedad ayudó a que muchas empresas dieran continuidad a sus negocios, cuando enviaron a sus empleados tuvieron que trabajar desde sus hogares, sin previo aviso.
Lastimosamente, muchas compañías en el mercado local aún no se animan a utilizar software en la nube, ante temores infundados de tener inconvenientes de seguridad, perder el control de sus archivos digitales o tener una curva de aprendizaje muy larga que afecte sus negocios, entre otros. Miedos que las nuevas plataformas digitales ya han superado.
Por lo pronto, para reducir el impacto de estos retos, me gustaría presentar algunas recomendaciones que debería seguir su organización si decide (o si ya decidió) utilizar servicios en la nube:
- Planificar y evaluar todo lo referente a número de usuarios, dependencias, aplicaciones que requiere cada uno y la configuración de los servidores físicos y virtuales si los hay. Este rápido inventario permitirá evaluar la demanda y los servicios en la nube que necesita.
- Diseñar para identificar las aplicaciones candidatas, las bases de datos, la capacidad de almacenamiento y servidores virtuales que se vayan a necesitar. Asimismo, debe tener presente los requerimientos en materia de seguridad, necesidades de los usuarios y contingencia de los escenarios.
- Poner a prueba la migración para identificar y resolver los problemas que hayan surgido durante la etapa de diseño. Estipule previamente un equipo que estará a cargo del proceso, tanto desde la parte comercial como operativa. Una buena alternativa es realizar una prueba piloto, que permita evaluar fehacientemente como se realizará esta migración completa.
- Programar la migración preferiblemente en un periodo de baja actividad laboral, como un fin de semana, durante las vacaciones o en la noche. De esta manera, se generará el menor impacto en los colaboradores y usuarios que necesiten acceder a los servicios o datos de la compañía. Del mismo modo, durante el proceso se podrá medir si hay problemas de actividad o rendimiento, que se podrán corregir con mayor celeridad al no contar con un gran volumen de demanda de tareas.
Luego de que se realice la transición es recomendable una validación de las aplicaciones de datos y redes. Esto facilita la solución de fallas, anomalías en los datos y problemas de rendimiento.