Día de la MIPYME: la falta de educación financiera profundiza la exclusión de estas empresas del acceso al crédito
La Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 27 de junio como el «Día de las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas» para concientizar a nivel mundial sobre la enorme contribución de las MIPYME en la generación de empleo, el impulso a la economía local, la innovación y creatividad, el rol de éstas como agente promotor de la equidad y de la reducción de la pobreza, y en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU.
Sin embargo, en el Perú, la inclusión financiera todavía es un desafío crucial para nuestras MIPYME. A pesar de su importancia para la economía del país, pues conforman el 99,5% de la estructura empresarial y han generado el 90,9% del empleo en 2021, según información del Ministerio de la Producción (Produce), muchas pequeñas y medianas empresas enfrentan dificultades para acceder a servicios financieros adecuados. Esta problemática limita su crecimiento y desarrollo.
Una de las principales barreras a las que se enfrentan las MIPYME peruanas es la falta de acceso al crédito. Fernando Gamarra, gerente general de Chita Factoring, sostiene que las entidades financieras tradicionales suelen imponer requisitos estrictos que las pequeñas empresas no pueden cumplir, como garantías y documentación complicada. Esto deja a las MIPYME sin opciones para financiar sus operaciones y expandirse.
Además, la falta de educación financiera también contribuye a la exclusión. Muchos propietarios de MIPYME carecen de conocimientos básicos sobre gestión financiera y cómo utilizar los servicios financieros de manera eficiente. Esto limita su capacidad para tomar decisiones informadas y aprovechar las oportunidades disponibles.
“Otro desafío importante es la infraestructura limitada. Muchas MIPYME se encuentran en áreas rurales o alejadas de los centros financieros, lo que dificulta el acceso a sucursales bancarias o cajeros automáticos. La falta de servicios financieros cercanos obliga a los empresarios a realizar largos desplazamientos y aumenta los costos operativos”, afirma.
Considera que, para abordar esta problemática, es necesario promover medidas que fomenten la inclusión financiera de las MIPYME peruanas. Esto implica la creación de programas de capacitación financiera adaptados a las necesidades de los emprendedores, para que puedan adquirir habilidades financieras y gestionar de manera eficiente sus recursos.
Asimismo, se requiere una mayor colaboración entre las entidades financieras y las MIPYME. Las instituciones financieras deben desarrollar productos y servicios financieros adaptados a las necesidades de las MIPYME, como préstamos flexibles con tasas de interés accesibles y requisitos simplificados.
“Además, es fundamental impulsar la adopción de tecnologías financieras, como el uso de aplicaciones móviles y plataformas electrónicas, que faciliten el acceso a servicios financieros de forma remota”, resalta el gerente general de Chita Factoring.
La inclusión financiera de las MIPYME peruanas es un desafío que requiere atención y acciones concretas. Mediante la implementación de medidas que fomenten el acceso al crédito, la educación financiera y el desarrollo de infraestructuras adecuadas, se puede impulsar el crecimiento y desarrollo sostenible de las MIPYME, fortaleciendo así el tejido empresarial del país, concluye Gamarra.