Salud

Obesidad: Cirugias que devuelven salud y calidad de vida

La obesidad no es solo un problema estético, es una enfermedad crónica con amplias repercusiones en la salud. Múltiples estudios revelan su íntima relación con más de 200 afecciones como la diabetes, hipertensión, males cardiovasculares, cáncer, entre otras; que pueden disminuir significativamente la calidad de vida e incluso causar la muerte. Afecta a personas de todas las edades y se estima que más de 2,500 millones de hombres y mujeres en el mundo tienen problemas de sobrepeso y obesidad.

El doctor Fernando Schiaffino, cirujano bariátrico de la Clínica Ricardo Palma, señala que, en los últimos años, el número de pacientes con obesidad se ha multiplicado de manera alarmante. Esta patología no solo afecta físicamente a quienes la padecen, sino que también impacta su bienestar emocional, generando cuadros severos de ansiedad, baja autoestima y depresión. Por ello, es fundamental tomar medidas oportunas para evitar situaciones que pongan en riesgo la vida.

Aunque existen grandes avances en farmacología para luchar contra el sobrepeso y la obesidad, la aplicación de estos desarrollos depende del grado de compromiso de la afección. En este contexto, las cirugías bariátricas buscan reducir la cantidad de alimento a ingerir, de modo que porciones menores de comida generen saciedad, aporten los nutrientes necesarios al organismo y promuevan cambios metabólicos que favorezcan la pérdida de peso y la mejoría de enfermedades asociadas a la obesidad.

Tipos de técnicas

Las cirugías han demostrado ser muy eficaces para combatir esta enfermedad. Tanto la manga gástrica como el bypass gástrico son buenas opciones de tratamiento. Sin embargo, el especialista debe recomendar la más apropiada examinando individualmente cada caso. En este proceso, es clave la evaluación del equipo tratante. Se valora la edad, el exceso de peso, el historial de obesidad de la persona, las afecciones asociadas, entre otros factores. Por ejemplo, si una persona tiene obesidad mórbida, reflujo gastroesofágico o diabetes, es probable que le sugieran hacerse un bypass gástrico. En cambio, si el paciente tiene obesidad grado II, afección o enfermedad hepática, inclusive cirrosis, pueden sugerirle la manga gástrica.

Ambos procedimientos son seguros, se realizan por vía laparoscópica y permiten una pronta recuperación. Sin embargo, para obtener los mejores resultados a largo plazo, es esencial adoptar un estilo de vida saludable. Los pacientes que se realizan estas cirugías deben dejar atrás los malos hábitos alimenticios, seguir una dieta balanceada y realizar actividad física con regularidad.

La obesidad es una enfermedad compleja que requiere ser evaluada con un enfoque multidisciplinario. Aunque existen grandes avances en farmacología para luchar contra el sobrepeso y la obesidad, la aplicación de estos desarrollos depende del grado de compromiso de la afección. Por ello, las cirugías bariátricas siguen siendo las intervenciones que proporcionan mejores resultados en términos de pérdida de peso, mejoría de enfermedades asociadas y mantenimiento de la salud a largo plazo.