Especialista recomienda que la atención de las personas con TEA se realice con personal de salud capacitado y con experiencia
Tras la denuncia que hizo la familia de una persona con Trastorno de Espectro Autista (TEA) por maltrato físico y estafa contra un supuesto centro de tratamiento de autismo, la psiquiatra Katherine Arias del Centro de Salud Mental Comunitaria Kuyanakusun del Ministerio de Salud (Minsa) indicó que es importante que los padres confíen la atención de sus hijos con TEA a personal de salud capacitado y con experiencia.
“Tenemos que saber dónde vamos a depositar la confianza para la atención de nuestros hijos, si no es una institución pública, debemos saber quiénes van a tratar a nuestro familiar, si el personal de salud está capacitado y si tiene experiencia de trabajo con personas con esta condición, además la institución debe brindarnos formas de monitorear la intervención de nuestro hijo”, alertó Katherine Arias.
Por ello, antes de acudir a un servicio de salud privado, es importante consultar el Registro Nacional de Instituciones Prestadoras de Servicios de Salud (Renipress), de la Superintendencia Nacional de Salud (Susalud), para saber si el centro de salud al que deseamos acudir es formal y tiene autorización para funcionar.
En otro momento, la especialista aclaró que en la actualidad no hay medicamentos que curen el TEA, pero hay algunos fármacos que pueden ayudar a tratar ciertas manifestaciones, los cuales deben ser prescritos únicamente por médicos.
El TEA es una condición y no una enfermedad
Katherine Arias precisó que el TEA no es una enfermedad porque no se ha encontrado una causa biológica directa que lo origine; además, indicó que se presenta en niños o niñas de cualquier nivel socioeconómico, grupo étnico, lugar de procedencia y sexo, pero es más frecuente en los hombres.
Asimismo, las personas con TEA, con frecuencia, tienen problemas en dos grandes áreas: la comunicación y la interacción social. También, exhiben dificultades en el desarrollo de gestos, juego simbólico, lenguaje e interacción social, que muchas veces pueden pasar desapercibidos.
Señales a los que debemos estar atentos
Katherine Arias explicó que se puede detectar señales de alerta desde una edad muy temprana, incluso, cuando nuestro hijo o hija es evaluado en el servicio de control del crecimiento y desarrollo (CRED). Destacó que hay indicadores que a los padres les deben llamar la atención:
● No mira a los ojos cuando le hablan o lo hace muy brevemente.
● No sonríe ni se ríe con las personas (excepto cuando se le hace cosquillas).
● No voltea cuando lo llaman por su nombre.
● No señala con su dedo índice cuando quiere algo, solo jala de la mano.
● Tiene muchas repeticiones de palabras o frases que escucha.
● No hace gestos para pedir o comunicar algo.
● No sabe cómo utilizar objetos de uso común.
● No imita acciones.
● No puede seguir instrucciones sencillas.
● Muestra poco interés por las personas y prefiere jugar solo.
“Estas situaciones deben preocuparnos y llevarnos a pedir una ayuda profesional pronta”, señaló la psiquiatra.
La especialista dijo que las personas con TEA requieren de múltiples servicios y especialidades en su atención debido a la complejidad y variabilidad de las manifestaciones.
Al respecto, informó que los Centros de Salud Mental Comunitaria tienen equipos interdisciplinarios (médicos psiquiatras, médicos de familia, psicólogos, tecnólogos médicos, entre otros), que realizan evaluaciones diagnósticas e intervenciones, así como servicios y programas terapéuticos y de rehabilitación psicosocial para ayudar a mejorar las dificultades que presentan las personas con esta condición.
Finalmente, reiteró que empezar la intervención cuanto antes, brinda mayores probabilidades de que la niña o niño con TEA desarrolle sus habilidades y mejore su calidad de vida.
Recuerda para recibir orientación en temas de salud mental puedes llamar a la línea 113 opción 5, las 24 horas del día y todos los días del año.
