Lima, septiembre de 2025.- En un mercado saturado de opciones, el diseño y la presentación del envase se han convertido en determinantes para captar la atención del consumidor. De acuerdo con NielsenIQ, dos de cada tres personas adquieren un producto nuevo cuando el envase llama su atención, y un 41% repite la compra motivado por el mismo factor.
El impacto es aún mayor si se considera que el 60% de las decisiones de compra se toman directamente en el punto de venta, donde la forma, los colores y la innovación en el envase pueden marcar la diferencia frente a la competencia. Según NielsenIQ, un envase bien diseñado puede generar un retorno de inversión 2.5 veces superior, lo que lo convierte en un recurso estratégico para las marcas.
Para Eduardo Pérez, gerente de Marketing de Tetra Pak, la primera impresión es decisiva. “Un envase capaz de destacar en los estantes no solo atrae miradas, sino que también transmite el valor y la promesa de la marca en segundos. Así, el atractivo visual se convierte en un puente emocional entre el producto y el consumidor”, señala.
En ese contexto, la innovación en envases está respondiendo a consumidores cada vez más exigentes, que buscan experiencias personalizadas, seguras, interactivas y sostenibles. Pérez identifica cinco tendencias que están transformando el sector:
1. Envases personalizados. Adaptan diseños, colores y mensajes a públicos específicos, generando conexiones emocionales únicas y aumentando el valor percibido. Además, pueden producirse en diversos formatos, desde presentaciones individuales hasta tamaños familiares.
2. Envases seguros. Gracias a tecnologías de envasado aséptico, garantizan la calidad y prolongan la vida útil de los alimentos sin conservantes. Los envases de cartón de Tetra Pak®, por ejemplo, incorporan capas protectoras que bloquean oxígeno, bacterias y contaminantes.
3. Envases inteligentes. Integran códigos QR, realidad aumentada y sistemas de trazabilidad que amplían la interacción y ofrecen transparencia sobre el origen y el recorrido del producto.
4. Envases 3D. Incluyen relieves y texturas que estimulan el tacto, refuerzan la experiencia sensorial y aportan exclusividad. Este recurso permite destacar elementos clave como logotipos o ilustraciones.
5. Envases sostenibles. Fabricados con materiales renovables, facilitan el reciclaje y contribuyen a la economía circular. En el caso de los envases de cartón para bebidas, tras su uso pueden reincorporarse a nuevos procesos productivos.
El especialista enfatiza que, en un entorno donde cada detalle cuenta, el envase deja de ser un contenedor para convertirse en “el embajador silencioso de la marca”. Así, las tendencias actuales no solo redefinen la estética, sino que también potencian la funcionalidad, la sostenibilidad y la conexión emocional con el consumidor.