Sostenibilidad empresarial: el 98% de los CEOs la considera clave para su negocio

Los desafíos medioambientales, sociales y económicos son cada vez más evidentes y la sostenibilidad es un factor clave para las empresas. Adoptar prácticas responsables no solo responde a una demanda ética, sino que también genera ventajas competitivas y económicas. En ese contexto, el Pacto Global de la ONU es la mayor iniciativa en sostenibilidad empresarial, promoviendo principios en derechos humanos, laborales, medioambientales y anticorrupción.

Más de 22 000 empresas en el mundo forman parte del Pacto Global, a fin de acelerar la transformación hacia un modelo más sostenible. En Perú, 111 empresas han asumido este compromiso en 31 sectores, generando empleo a más de 400 mil personas. Esto confirma que la sostenibilidad ya no es solo una tendencia, sino un pilar esencial para el desarrollo empresarial.

Uno de los mitos más comunes es el alto costo de implementación de prácticas y proyectos de sostenibilidad. Sin embargo, estudios de Dun & Bradstreet indican que las empresas con un sólido desempeño en ESG (impacto ambiental, social y de gobierno corporativo) superan hasta en un 30% el volumen de ingresos, de aquellas que no priorizan estos aspectos. Además, la sostenibilidad influye en la atracción y retención de talento. Según Deloitte, el 40% de los millennials ha rechazado empleadores que no se alinean con sus valores de sostenibilidad, y el 75% de millennials y generación Z consideran el impacto social de una empresa como un criterio clave al elegir dónde trabajar.

Impacto del Pacto Global

El 98% de los CEOs considera la sostenibilidad fundamental para la resiliencia empresarial, 15 puntos más que hace una década. Además, el 96% de los líderes cree que el sector privado es crucial para cumplir de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), y el 73% prevé un aumento de la presión para actuar en los próximos tres años. En respuesta, el 63% de las empresas ha lanzado productos y servicios sostenibles, y el 49% avanza hacia la economía circular.

En Perú, el avance en sostenibilidad es evidente. Empresas nacionales dentro del índice Dow Jones de Sostenibilidad han demostrado liderazgo, siendo modelos para otras organizaciones. La contratación de talento en este ámbito creció un 50% frente a la tradicional. De hecho, los profesionales en sostenibilidad son el cuarto grupo laboral de mayor crecimiento en Latinoamérica, por detrás de la inteligencia artificial, ciencia de datos e inteligencia de negocios.

El futuro de la sostenibilidad

El informe de riesgos del Foro Económico Mundial advierte que, en la próxima década, los mayores peligros serán los eventos climáticos extremos, pérdida de biodiversidad, colapso de ecosistemas, escasez de recursos naturales y desinformación. La sostenibilidad no es solo un compromiso, sino una estrategia para la resiliencia y la competitividad.

En este contexto se identifica cuatro tendencias clave en sostenibilidad empresarial en el 2025:

1. Navegar escenarios legales. La regulación crece a nivel global. Según Carrots & Sticks, el 45% de las normas de sostenibilidad ya son obligatorias. “Las regulaciones no solo afectan a las grandes empresas, sino también a sus proveedores y clientes, además de ir más allá de las fronteras por lo que empresas de todos los tamaños deben adaptarse rápido”, señala Mathieu Piccin, Director para América Latina de Sustainability Business, la consultoría de energía y sostenibilidad de Schneider Electric.

• Responder a frameworks dinámicos. La complejidad de los informes voluntarios aumenta. CDP exige evaluaciones de riesgo climático y planes de transición climática para calificaciones altas, Science Based Targets (SBTi) revisará su estándar de Cero Neto Corporativo en 2025, y la ISO presentará en la COP30 su norma de Cero Neto con requisitos verificables para todas las industrias. El éxito en este panorama cambiante dependerá de una infraestructura de datos sólida que pueda adaptarse a los nuevos requisitos y, al mismo tiempo, mantener la integridad de los datos. Las empresas que inviertan ahora en fortalecer sus sistemas de informes estarán mejor preparadas para afrontar los cambios regulatorios futuros.

• Controlar la complejidad de los datos. La gestión de datos es un reto a la medida que los marcos y regulaciones de reporte demandan información cada vez más detallada, trazable y auditable. En este sentido, la digitalización es clave. Las empresas deben ir más allá de las mejoras incrementales y adoptar una transformación integral de la forma en que se recopilan, procesan e integran los datos en los distintos sistemas. Las tecnologías avanzadas, incluidas las herramientas basadas en inteligencia artificial, están demostrando ser invaluables en esta área. Plataformas como EcoStruxure Resource Advisor de Schneider Electric centralizan información crítica desde varios puntos de entrada y la procesan para convertirla en información accionable.

• Ampliar el enfoque hacia la naturaleza y la biodiversidad. De cara a la COP30 en Brasil, la naturaleza y la biodiversidad se posicionan para dominar la agenda global de sostenibilidad. Asimismo, CDP, incorporó biodiversidad a su cuestionario en 2024. Sin embargo, solo el 25% de las empresas peruanas reportan sobre biodiversidad. Pacto Global realizó la Primera Consulta Empresarial de Biodiversidad 2024 en Perú, revelando que el 61% de las empresas percibe presión para gestionarla, pero solo el 36% tiene una política clara. El 2025 ofrece una oportunidad para que las empresas cierren esta brecha. Marcos como la Guía FLAG de SBTi ofrecen caminos para abordar las emisiones relacionadas con la tierra y la restauración de ecosistemas. Las organizaciones también pueden integrar objetivos de biodiversidad en sus estrategias climáticas más amplias.

Al respecto Piccin afirma, “Trabajamos de la mano de nuestros clientes para ayudarlos a adaptarse, evolucionar y destacarse frente al cambio, independientemente del punto de partida. No importa el nivel de madurez o el momento del cambio en el que estén. Trabajamos desde la medición del impacto hasta la definición de la estrategia, la gestión digital de los programas de energía, sostenibilidad y ESG y la implementación de soluciones de descarbonización”.

Hoy, la sostenibilidad es un factor clave de competitividad y resiliencia. Con regulaciones más estrictas, consumidores y talentos más exigentes, las empresas que adoptan estrategias sostenibles reducirán riesgos, identificarán nuevas oportunidades e impulsarán su crecimiento. Iniciativas como el Pacto Global y soluciones innovadoras de líderes como Schneider Electric demuestran que integrar la sostenibilidad en la estrategia corporativa genera impacto real. A medida que más empresas peruanas se sumen a esta transformación, el país avanzará hacia un ecosistema empresarial más sólido, eficiente y preparado para el futuro.