Minsa: la importancia de realizar actividad física para proteger la salud mental
El 8 de octubre de celebra el Día de la Educación Física en el Perú, fecha en la que se recuerda que el sedentarismo es un factor de riesgo a enfermedades no transmisibles, es decir, aquellas que en gran medida se adquieren por hábitos inadecuados, como la mala alimentación, el sedentarismo y la mala calidad del sueño, entre otros.
Si bien, las enfermedades no transmisibles, como la diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares, enfermedades respiratorias, y ciertos tipos de cáncer, son las principales causas de muerte o discapacidad, el sedentarismo también afecta la salud mental, explicó el psicólogo Néstor Rejas Tataje, jefe de equipo de Promoción de la Salud del Ministerio de Salud (Minsa).
Rejas manifestó que las personas activas tienen menos riesgo de depresión y ansiedad; esto debido a que los ejercicios estimulan la producción de hormonas del bienestar como la serotonina, la oxitocina, adrenalina y dopamina. Por ello, las personas activas experimentan mayor sensación de bienestar y es natural que al bailar, jugar o hacer deportes, las personas sonrían y experimenten mayor bienestar.
“La actividad física contribuye a la regulación del comportamiento, por lo que las personas activas suelen ser mas estables y menos violentas. Es por esta razón que muchos programas deportivos son eficaces para combatir la violencia social, además de generar condiciones favorables y mayores oportunidades para que las personas usen adecuadamente el tiempo libre”, indicó el psicólogo.
Asimismo, Néstor Rejas sostuvo que existe mucha evidencia que la actividad física, especialmente los ejercicios de fuerza muscular, protegen de las demencias como el alzheimer.
Precisó, además, que una de las principales causas de muerte en adultos mayores son las caídas y la depresión, motivo por el cual se insta a la población a mantenerse activos en todas las edades, más aún las personas adultas mayores o con alguna comorbilidad.
Los adultos mayores deben realizar al menos 30 minutos diarios de ejercicios de fuerza muscular, especialmente para fortalecer el tren inferior, es decir los músculos de las piernas y caderas; así como la flexibilidad y equilibrio.