¿Por qué da más hambre cuando hace frío?
Comer un poco más cuando hace frío es algo normal, es una reacción natural del organismo frente a las bajas temperaturas; sin embargo, es importante tomar en cuenta una serie de recomendaciones para evitar subir de peso. La licenciada Karen Velásquez, nutricionista de la Clínica Ricardo Palma, explica por qué se produce esa sensación frecuente de hambre durante el invierno y brinda algunos consejos sobre cómo debe ser la alimentación en esta temporada.
El frío provoca un aumento en la producción de la hormona melatonina, encargada de regular el sueño, el descanso y también de disminuir la temperatura corporal. Cuando esto ocurre, el organismo siente la necesidad de ingerir más alimentos calóricos (altos en grasas y carbohidratos) para subir la energía. Basta tener una temperatura por debajo de los 36.5° C para tener la necesidad de comer dulces, pasteles, chocolates y azúcar.
Las bajas temperaturas también provocan cambios en las preferencias de las comidas. Hacen que nos provoquen bebidas y platos calientes y más elaborados. Por eso, hay que tener mucho cuidado si tenemos sobrepeso o queremos mantener un peso adecuado. Es importante no abandonar los buenos hábitos de alimentación para evitar complicaciones con la salud a mediano plazo.
En este contexto, se recomienda elegir entradas como sopa o crema de verduras, comer carnes magras de pollo, pescado y res, mantener un adecuado consumo de frutas, ingerirlas entre comidas e incluir una porción de cítricos. También es clave hidratarse correctamente. Infusiones, mates calientes sin azúcar o bajos en azúcar, y caldos de vegetales son buenas opciones. Los frutos secos, compotas sin azúcar y/o yogur griego son alternativas sanas para consumir a media mañana o tarde.
EVITE LOS IMPULSOS
Ahora que ya sabe que su cuerpo le va a pedir alimentos ricos en calorías para mantenerse caliente, no se deje llevar por los impulsos. Haga postres saludables en casa utilizando harina integral u opte por consumir chocolate con cacao al 70% en vez de comer los comerciales que solo tienen azúcares y grasas saturadas.
Consumir frutas en compotas o al horno ayuda a calmar esa sensación de querer ‘algo dulce’ sin incrementar en forma desproporcionada el consumo de calorías. Si es amante del café, beba un capuchino o mocachino sin azúcar para combatir el frío. Manténgase alejado de los productos ultraprocesados como sopas instantáneas, dulces o golosinas. Finalmente, duerma de 7 a 8 horas al día y haga ejercicios por lo menos 3 veces a la semana. Siga estos consejos y no ganará peso.