La digitalización es una herramienta poderosa para combatir el cambio climático
Lima, julio de 2025.- Aunque la transformación digital ha impulsado la eficiencia y la innovación en diversos sectores, también genera importantes impactos ambientales que deben ser atendidos. Según el Informe sobre la Economía Digital 2024 de la UNCTAD, los centros de datos consumen entre el 1% y el 1.5% de la electricidad mundial, y el sector digital en su conjunto representa hasta el 3.9% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, superando incluso a la industria de la aviación.
Además, la generación de residuos electrónicos continúa en aumento. En 2023 se produjeron más de 62 millones de toneladas de e-waste, pero menos del 20% fue reciclado de manera adecuada. Frente a este panorama, la digitalización debe ser acompañada por políticas y prácticas sostenibles.
Para Fiorella Escalante, Country Manager de Inetum, el reto está en encontrar el equilibrio: “La digitalización no es sostenible por sí sola. Requiere políticas públicas, innovación responsable y una ciudadanía digitalmente consciente”.
En sectores como la agricultura y la industria, el uso de sensores inteligentes e inteligencia artificial ha permitido reducir el consumo de agua y energía en un 20% a 30%. Inetum, empresa especializada en soluciones digitales, promueve tecnologías que contribuyen directamente a la sostenibilidad ambiental, como los smart grids, el mantenimiento predictivo mediante IoT, y plataformas digitales que optimizan la distribución de energía renovable.
“La transformación digital debe ir de la mano con la sostenibilidad. No se trata solo de velocidad o capacidad, sino de generar un impacto positivo y duradero”, añade Escalante. En ese sentido, Inetum reafirma su compromiso con una digitalización responsable, colaborativa y ambientalmente consciente.