COVID-19: ¿Qué sabemos hasta el momento de la variante C.37?
El SARS-CoV-2 es un virus que se encuentra en constante mutación, por ello, y por la transmisión activa que aún presenta en el mundo, han aparecido diversas variantes del virus inicial que apareció en Wuhan (China) en noviembre de 2019.
“Las mutaciones o variantes en los virus son comunes, porque en el proceso de infección e invasión de células de un organismo puede que, para adaptarse y asegurar una mejor supervivencia, tengan que mutar. La COVID-19, al ser un virus de alta circulación, sin duda presenta y presentará una serie de variantes, pero lo importante es realizar los estudios necesarios para detectar y tomar medidas frente aquellas variaciones que puedan ser de carácter crítico para la población”, explicó Jorge Samamé, epidemiólogo del Instituto Carrión.
En nuestro país, hasta el momento, se han detectado alrededor de 53 variantes del virus SARS-CoV-2, de las cuales el linaje más frecuente es el B.1, en los que se encuentran los sublinajes B.1.1.1 y B.1.1.29.
¿Qué conocemos de la variante C.37 hasta el momento?
El especialista del Instituto Carrión nos comparte los siguientes puntos clave:
- La variante C.37 se detectó en Perú después de secuenciar 623 muestras en 19 regiones, detectando que el 80% correspondía a este tipo.
- Se especula que es la causante del aumento de contagios durante la segunda ola en nuestro país, sin embargo, no hay estudios concluyentes que refuercen esta teoría.
- No hay evidencias a la fecha que permitan asegurar una mayor transmisibilidad ni letalidad.
- No tiene un origen determinado por lo cual no es preciso llamarla “variante andina” o peruana, ya que también ha sido detectada en Chile, Argentina, Ecuador, EE. UU., Australia, Alemania, España y Reino Unido.
Variantes de preocupación
Si bien, hasta la fecha, la variante C.37 no ha sido catalogada como variante de preocupación, existen algunas que sí cumplen con las características planteadas por la Organización Mundial de Salud (OMS) para ser consideradas alarmantes como, por ejemplo, la B.1.1.7 (“británica”), P.1 (“brasilera”) y B.1.351 (“sudafricana”). Además, el Centro de Control de Enfermedades de EE.UU. (CDC) agrega las B.1.427 y B.1.429 (“californianas”).
Para finalizar, el epidemiólogo del Instituto Carrión hace énfasis es seguir tomando las medidas de bioseguridad que ya conocemos. “Una tercera ola en nuestro país no se puede descartar. El proceso de vacunación está siguiendo su curso, pero para lograr la inmunidad de rebaño es necesario vacunar al 70% u 80% de la población y, por el momento, se ha inmunizado con ambas dosis solo al 5%”, indicó.