Actualidad

Seguridad vial: Tres reparaciones claves para los vehículos

En Perú, se registran anualmente más de 94.000 accidentes de tránsito, de los cuales el 3% son por alguna falla mecánica del vehículo según el Ministerio de Transporte y Comunicaciones (2019). En ese sentido, el mantenimiento y la reparación automotriz, resulta un factor sumamente relevante para la prevención de siniestros o la minimización de sus efectos y que, además, juega un rol fundamental para la seguridad del conductor, pasajeros y peatones.

Bajo este contexto, la empresa Henkel, líder mundial en el mercado de soluciones adhesivas, anunció la llegada de su negocio de reparación y mantenimiento de automóviles al mercado peruano, con el objetivo de brindar productos innovadores y de calidad para el sector automotriz y de transporte. Ante ello, sus expertos nos presentan aspectos claves que se deben tomar en cuenta al momento de llevar nuestro vehículo al taller mecánico:

1.     Mantenimiento y sustitución de frenos: Es de vital importancia que el sistema de frenado se encuentre en un estado de funcionamiento óptimo. Para esto, se deben realizar una serie de acciones de mantenimiento, como son la sustitución de las pastillas o el cambio de discos de freno cuando sea necesario. No existe un intervalo exacto para cambiar los discos de freno, ya que depende del tipo de conducción o la vía que se transita de forma habitual.

Para la sustitución de estos discos, es crucial utilizar un trabaroscas químico, porque además de prevenir el aflojamiento por vibración, protege el sistema de frenos contra la corrosión. Así mismo, para el cuidado del sistema de frenos, se recomienda utilizar un limpiador multipropósito que elimine la grasa o suciedad que pueda originar fallas en las piezas.

2.     Reparación de parachoques plásticos: Esta parte de la carrocería del vehículo, que tiene como objetivo amortiguar y reducir los daños de un choque, es la que podría impactar a peatones, ciclistas o motociclistas durante una colisión. Por esto, es importante que en su reparación o mantenimiento se utilicen materiales que le devuelvan la resistencia y flexibilidad original, y evitar emplear mallas de metal, ya que causarían mayor daño físico durante un choque.

Para ello, una de las alternativas más efectivas, es el uso de adhesivos bicomponentes que aseguran una reparación con muy buenas garantías, en un tiempo reducido y con un acabado excepcional. Otra opción, es la aplicación de masilla para plásticos, que se caracteriza por ser más flexible, elástica y menos porosa que las masillas para metal.

3.     Sustitución de parabrisas: La rotura o fractura del parabrisas, se produce generalmente por una colisión frontal del vehículo o por el golpe imprevisto con algún objeto contundente durante el manejo, sin embargo, en cualquiera de estos casos, este debe ser reemplazado por completo. Por ello, es primordial prestar atención al proceso de instalación y verificar que se utilicen insumos fiables y similares a los de fábrica, para conseguir los niveles de seguridad iniciales del vehículo.

Hoy en día se recomienda la utilización de adhesivos estructurales para su sustitución, pues brindan la flexibilidad necesaria para absorber impactos externos y soportar la activación de los airbags frontales. Este sistema de adhesión, reduce el peso del vehículo y contribuye a la resistencia del techo y pilares. En los automóviles modernos, el parabrisas y luneta adheridos como un elemento estructural, brindan más del 40% de la rigidez estructural de la carrocería.

En definitiva, un constante mantenimiento en los vehículos puede contribuir a reducir la cifra de accidentes por fallas mecánicas en el Perú y de salvar las vidas durante una colisión. Asimismo, es muy relevante tener en cuenta la calidad de los implementos utilizados para las reparaciones y revisiones de mantenimiento. En el mercado peruano, existen una amplia gama de productos de gran fiabilidad y garantía como los de Henkel, compañía proveedora de los principales fabricantes de automóviles en el mundo, que cumplen con el requisito mínimo de seguridad de ser previamente testeados con el fin de proteger la vida de los usuarios.