Resultados revelan el fortalecimiento de las prácticas de sostenibilidad de las empresas
Actualmente la sostenibilidad no es sólo una tendencia empresarial, sino más bien una oportunidad de cambio hacia una nueva forma de hacer negocios, que aumenta la resiliencia de la empresa al estar conectada con la sociedad y el medio ambiente para afrontar mejor los desafíos del futuro. Esto se ve reflejado en los resultados obtenidos en la última edición del Distintivo ESR (DESR) realizado por Perú Sostenible, red de empresas unidas por el desarrollo social, ambiental y económico del país.
Más allá de un sello, el Distintivo Empresa Socialmente Responsable (DESR) es una herramienta de gestión que, año tras año, evalúa aspectos ambientales, sociales y de gobernanza (ASG) en los negocios, mediante indicadores específicos alineados a estándares internacionales de sostenibilidad. Micaela Rizo Patrón, Gerente General de Perú Sostenible, declaró que son cada vez más las empresas que apuestan por lograr una gestión integral de la sostenibilidad alineada con el eje central del negocio. Esto se evidencia en los resultados del DESR 2020, donde las empresas participantes aumentaron un 9% en el desarrollo de estrategias de sostenibilidad (nivel de cumplimiento de 83.5%) en comparación con la edición 2019 y a pesar de la crisis sanitaria y económica que atravesamos como país.
“Durante muchos años, las empresas trabajaron más el tema de responsabilidad social con un enfoque filantrópico o de asistencialismo para aportar a la sociedad, muchas veces de manera aislada al core del negocio. Desde hace unos años, hay una evolución en esta mirada hacia la sostenibilidad, hacia un enfoque sistémico, donde la estrategia de sostenibilidad de las empresas es integral, buscando desarrollar capacidades entre sus diferentes grupos de interés, impactando positivamente en la sociedad, en lo social, ambiental y económico, siempre alineada al core del negocio”, comentó Micaela.
Una de las temáticas que aborda del Distintivo ESR es “Ética e integridad”, un elemento clave para la gobernanza en las empresas que evalúa las políticas, mecanismos y programas de formación con objetivos claros de impacto que sean medibles. Al respecto, el análisis de la última edición del DESR muestra que esta categoría alcanzó uno de los niveles de cumplimiento más altos de 89.47%, que representa un aumento de más de 10 puntos porcentuales respecto a la edición anterior. De forma similar, el indicador de Buen Gobierno Corporativo logró un aumento de más de 11 puntos con respecto a la edición anterior (nivel de cumplimiento de 85.5%). Estos dos indicadores muestran que las empresas están avanzando notablemente en términos de gobernanza corporativa.
Según explicó Micaela Rizo Patrón, se ha visto un avance muy claro en torno a estos temas desde el interior de las empresas con la incorporación de mecanismos de compliance e implementación de comités especializados. “Se ha pasado de tener un código de ética voluntario a implementar sistemas anticorrupción, de ética y de cumplimiento de forma más integral. Además, nuestro país ya cuenta con una mayor normativa sobre integridad y anticorrupción, lo que ha afianzado el compromiso del sector”.
El uso del Distintivo ESR como herramienta de gestión para la sostenibilidad va de la mano con la creciente tendencia de mayores exigencias para una mejor gestión ambiental, donde ya existe una regulación más clara que exige que empresas en algunos sectores midan y gestionen su impacto ambiental. Rizo Patrón recalca que las empresas financieras juegan un rol clave como palanca para acelerar esta transición hacia una economía más verde.
Es importante precisar que “a pesar de los retos que han venido enfrentando desde el año anterior, las empresas han demostrado resiliencia y adaptabilidad a partir de un propósito claro, lo cual se ha evidenciado en los resultados del DESR. Incluso, en muchos casos ha sido la oportunidad para asumir un mayor compromiso genuino con la sociedad y el entorno a partir de uno de los grandes aprendizajes que nos trajo la pandemia: la importancia de la interconexión con nuestros grupos de interés”, según comenta Micaela.
En tal sentido, la gerenta de Perú Sostenible recomienda que las empresas tengan una visión integral de las responsabilidades que tienen en su rol como agentes de cambio, mediante una estrategia sostenible medible, integrando los indicadores tradicionales de riesgo financiero con métricas enfocadas en criterios sociales, ambientales y de gobernanza (ASG). Por eso cada año, Perú Sostenible viene impulsando el Distintivo ESR como una herramienta de gestión, que otorga una evaluación detallada para que las empresas mejoren su desempeño anualmente y así se aporte a una mejor sociedad.